Cita:

"Todo necio confunde valor y precio".
Antonio Machado

martes, 16 de noviembre de 2010

VENDO NIÑO POR 12 EUROS

ESTE TEXTO LO ESCRIBÍ Y PUBLIQUÉ EN LIBRO DE ARENA EN JULIO DE 2007, POR DESGRACIA HOY SIGUE VIGENTE.
¿HASTA CUÁNDO?

Decía mi paisano y siempre admirado Antonio Machado, que “todo necio confunde valor y precio”, una de mis frases favoritas por el hondo significado que encierra, y recordando aquella frase y al hilo de una fotografía que contemplé recientemente con estupor, me hago una pregunta ¿cuánto cuesta la vida de un niño?
La foto en cuestión era de la de un bebé ensangrentado con una herida abierta en la cabeza y cara de espanto. Lo menos importante era el pie de la fotografía, por desgracia podemos colocarle distintos comentarios pero las víctimas vienen a ser siempre las mismas, inocentes criaturas que simplemente pasaban por allí o cometieron el error de nacer en el lugar equivocado y en el momento menos idóneo. En este caso concreto era la víctima de un error de cálculo, uno más, de las fuerzas de la OTAN a la hora de bombardear una zona determinada de Afganistán. Eso sí, las autoridades incompetentes habían pedido perdón, con eso todo solucionado.
Podríamos iniciar un debate sobre quiénes son los culpables de estos conflictos. Unos dirán que son los locos fundamentalistas islámicos que ponen bombas en los trenes o estrellan aviones contra edificios, en cambio habrá quienes responsabilicen a los gobiernos occidentales que devastan zonas del llamado tercer mundo en busca de extender su poder hegemónico, sobre todo si en esa zona hay petróleo, gas o cualquier otra riqueza. Como decía Henry Kyssinger “Dios ha querido que el petróleo se encuentre en países donde ni lo necesitan, ni saben utilizarlo, así que nosotros debemos dominar esas zonas porque sí lo necesitamos y sabemos darle uso”, clarísimo ¿no?
Sean culpables unos u otros lo cierto es que asistimos a una escalada de violencia, el ojo por ojo está a la orden del día, si tu atentas contra los míos yo bombardeo a los tuyos, si tu explotas mis riquezas yo asesino a tus turistas y al final todos tuertos.
Lo que es indudable que el supuesto orden mundial es un auténtico desorden y un escándalo, el 80% de la riqueza mundial es disfrutada sólo por el 20% de la población del planeta, es lógico que quienes pasan hambre quieran arribar a nuestras costas, lo raro es que no se decidan por acabar con nosotros. De todo este panorama pesimista, lo que más me duele es el precio de la vida de un niño. 
En occidente nuestros hijos viven relativamente bien, tienen juguetes, estudios, sanidad, ropas de marca, vacaciones y múltiples oportunidades de "ser felices", en cambio en otras zonas del planeta, incluso a veces en nuestro país, los niños carecen de ropa, calzado, escuela, medicinas, juguetes, incluso comida, algunos de ellos mendigan o se ganan "la vida" trabajando como esclavos, prostituyéndose o ejerciendo de soldados. En la India se venden niños por 12 euros, por ese dinero yo voy a ver con mi hija una película en el cine.
El cordón umbilical de las hijas de "nuestros príncipes" (míos no lo son desde luego), ha sido congelado como medida preventiva, otros niños son secuestrados y asesinados para traficar con sus órganos. 
No sé que pensaréis, para mí está claro que el valor de una vida, sobre todo infantil, tiende al infinito, la naturaleza no tiene mejor paisaje ni mayor riqueza que la sonrisa de un niño, por desgracia lo que no está claro es cuál es el precio de una vida.

10 comentarios:

erato dijo...

Un texto que está por desgracia actualizado constantemente.El precio de una vida, de la vida de un niño ¿Crees que importa mucho a quien maneja el poder a todas las escalas?No es una pregunta que te haga a ti, me la hago constantemente.
Siempre he pensado que quien hiere a un niño en cualquiera de sus formas o torturas esconde una crueldad de la que hay que alejarse.Me encanta que hayas traido este tema aquí a tu Macondo y me gusdta aún más que seas de los que valoran la sonrisa de un niño y digas que su vida tiende al infinito.Eres especial, Rafa.Si no, serían imposibles tus palabras llenas de ternura y belleza siempre.Y además, lo mejor, es que sé que no solo son palabras.Abrazo infinito y niño para ti.

Ana dijo...

Pues desgraciadamente es así, nada cambia y siempre los mismos los mas desfavorecidos, me produce una tristeza infinita esa falta de justicia, un niño no es culpable de las miserias de los adultos y por desgracia sufren con toda la crueldad del mundo. Conmovedor tu mensaje y por desgracia siemprevivo

Un beso Rafa

MARTA dijo...

Tienes toda la razon los niños, los mas inocentes pagan las consecuencias y tiene valor que lo denuncies aunque digas muchas veces que no sirven de nada las palabras.Una huella mas.
Bsssss.

Sorti dijo...

"En la India se venden niños por 12 euros, por ese dinero yo voy a ver con mi hija una película en el cine." Cruda y cruel realidad.Que has constatado con maestría, indignación y pena.

RAFAEL MÉRIDA dijo...

Gracias Erato. Sé que este es un tema que te llega especialmente y sé que eres de esas personas que consiguen hacer sonreír a muchos niños. Tú eres especial y no son sólo palabras, como dices.
Otro abrazo grande hasta ti.

RAFAEL MÉRIDA dijo...

Tienes razón Ana, nada cambia para nuestra desgracia.
Gracias por pasarte por aquí y dejarme tu opinión.

Un beso.

RAFAEL MÉRIDA dijo...

Martita, sabes que prefiero los hechos a las palabras y me quejo de que en mí prevalezcan más las segundas sobre los primeros. Pero a veces también algunas palabras sirven, ¿no?
Y déjate de huellas que pareces policía, jajaja.
Un beso y no me lo tomes a mal.

RAFAEL MÉRIDA dijo...

Hola Sorti. Que alegría verte siempre. Lo he plasmado con indignación y pena, tienes razón, lo de la maestría son los ojos con los que tú me miras.
Muchas gracias.

FEPETE dijo...

Al haber escrito usted esto, Rafael, ha demostrado su gran sensibilidad social y que tiene un corazón noble.

No cambie usted a peor, sino a mejor, pues partimos de que lo bueno siempre puede crecer.

Un abrazo.

RAFAEL MÉRIDA dijo...

Muchas gracias Fepete por su comentario y eso es algo de lo que persigo, crecer, siempre crecer.